publié 2020-05-27 par
Norlan Echevarria
Por Frank Martín
Cuba es muy cautelosa en cuanto al momento de abrir sus fronteras nuevamente al turismo internacional, y mientras espera busca adaptar el sector a nuevas medidas sanitarias que seguramente serán imprescindibles cuando se reanude la industria mundial del ocio.
De acuerdo con una declaración del Ministerio del Turismo son dos los campos los que esa rama cubana está defendiendo con sus conceptos: el respeto a la seguridad nacional y al futuro del más importante eslabón de la economía.
Una nota oficial del ministerio del Turismo local anunció que se están “mejorando” de manera continua las instalaciones y protocolos de higiene en la rama para cuando reinicie sus actividades.

Entidades mundiales del turismo, aerolíneas, cadenas hoteleras, gobiernos y expertos están defendiendo la idea de que la Covid-19 cambiará muchos parámetros vinculados con la salud en la rama turística mundial.
En ese sentido se están estudiando una serie de nuevas medidas que afectarán el transporte aéreo y marítimo, los alojamientos y lugares de diversión que deberán incluir medidas de chequeo no solo para los viajeros que arriban sino también para el personal que los atiende.
Cuba no ha dado detalles sobre sus planes en este sentido.
Pero el sector turístico isleño ha sido descrito como “la locomotora de la economía nacional” por su lugar en cuanto a los ingresos del país y seguramente será preservado sin dañar la seguridad sanitaria, dijeron especialistas.
En un momento actual de éxito en el combate contra el nuevo coronavirus, las autoridades económicas de la isla negaron incluso que el país se esté preparando para recibir pronto los vuelos de aerolíneas aéreas que fueron suspendidos al cerrar la isla sus fronteras.
Se aclaró oficialmente que el país se abrirá a esos viajes cuando estos no sean una amenaza a la seguridad nacional que implican los contagios del coronavirus.